¡Hola!
Antes de presentarte el temazo de hoy, quiero darte las gracias.
Cada vez la sombra del burnout y la tristeza que tanto me está enseñando sobre mi misma y mi vulnerabilidad, se va alejando, dejando solamente las lecciones, ya sin la sensación de vacío, algo que agradezco muchísimo a Dios y a la vida, a mi gente que ha estado para mi en este momento… y a ti por preocuparte, por escribirme, por contarme tu historia.
Ha sido una maravilla este proceso, ahora que lo veo un poco más a la distancia lo puedo decir con certeza. Gracias.
Ahora, hoy quiero tocar un tema que probablemente te cause algún tipo de comezón… ya sea porque lo has vivido en primera persona o porque tú has sido la promotora de esta conducta.
Me refiero a uno de los más viejos hobbies sociales que ahora se puso de moda por hacerse virtual y poder llegar a las masas y convencerlas de que eres eso. Tenemos mucho de qué hablar sobre cuánto puede impactar para la seguridad y la identidad de otras mujeres que digas esto o permitas que alguien más lo diga, aunque no sea a ti, así que empecemos.
¡Vamos allá!
Ser libre no se trata de hacer lo que quieras, se trata de tener ovarios suficientes para explorar lo que quieres, mereces y salir en su búsqueda. #Slutshamming #DueñaYSeñora #ConAmorCarajo @DescubreMasDeTi
Gracias anónima por tu pregunta y por darme la oportunidad de hablar de un tema que tanto me apasiona, de dar la recomendación del libro de Karen Villeda que me ha dejado a la vez impactada y furiosa, y por seguir moviendo las aguas, porque como estamos no está bien.
Y está en nuestras manos cambiar la forma en que nos vemos, nos hablamos y hablamos de otras mujeres.
Ahora me gustaría ahora saber qué piensas sobre el impacto que tiene este mal hábito de avergonzar sexualmente a otras mujeres que parece inofensivo y puede hacer tanto daño. Ve a los comentarios aquí abajo y cuéntame.
Gracias por acompañarme, y no olvides que eres libre, valiosa y dueña de ti.
Mwah!