¡Hola!
En menos de un mes, exactamente el 15 de marzo, estaremos iniciando el diplomado Emociones Educadas de este año. El equipo y yo estamos preparando todo para darte la bienvenida, me gustaría muchísimo contar con tu participación si es algo en lo que te encantaría trabajar.
La semana pasada te conté sobre el curriculum, lo duro, las más de 100 clases que encontrarás, y quiero asegurarte que tienen un sustento científico y rigor propio de mi mente muy ñoña, pero quiero aclarar también que muchas de las formas en las que trabajaremos este contenido son para tu alma…. con preguntas que te lleven a reflexiones profundas, con visualizaciones, meditaciones, ejercicios prácticos y prácticas corporales (que ya te contaré la siguiente semana un poco más de eso) para que no sólo se quede a nivel mente sino que penetre a capas muy profundas de ti.
Hoy en el podcast te hablo más sobre el segundo pilar de trabajo de este programa, puedes conocer más sobre el diplomado en www.emocioneseducadas.com
En el podcast de hoy, Gaby pregunta sobre la disyuntiva entre revelarse más, defenderse y no callar por temor… pero tampoco volverse agresiva. Uff… qué tema, ¿no? Si te ha pasado estar en un lugar, querer estar en otro pero sentir miedo de moverte porque no sabes si es seguro o correcto, este programa es para ti. Da clic en la imagen para escucharlo:
Mi querida Gaby y toda persona que esté en este mismo dilema o miedo a volverse “mala”, espero que este programa haya al menos dado una perspectiva de que volverse mala puede ser exactamente lo que necesitas y que no significa ser mala o reprobable, sino salir de un lugar que no te está trayendo cosas buenas ni te está permitiendo explotar tu potencial.
Antes de despedirme, quiero recordarte que Emociones Educadas está por iniciar. En menos de un mes estaremos dando la bienvenida a las alumnas de la generación 2020. Habrá una semana entera de bienvenida, y el primero de marzo tendrás acceso a tu módulo 0, el módulo de orientación para prepararte para el inicio de los módulos intensos.
Gracias por acompañarme hoy, te mando un beso enorme.
