La primera entrevista que te quiero compartir este año es con una invitada que repite aparición (así de bien nos cae), Mireia Nieto.

Sé que ya lo conocimos en el podcast 193 en un podcast que nombramos “Genealogía e historia viva” y la verdad que amamos a Mireia, su claridad y su frescura para compartirnos esos puntos históricos muy interesantes como el de que los descendientes de Hitler se pusieron de acuerdo para no reproducirse (que en la entrevista de hoy lo vuelve a compartir).

De Mireia me gusta mucho que además de toda la información que guarda su cabeza tiene un corazón súper apasionado y nos indignamos juntas y es una pena que no haya video porque cuando grabamos este capítulo nos mirábamos mutuamente con mucha frustración compartida, y nada une tanto como la humanidad compartida sobre otras personas pasándola mal y que nos duela lo mismo.

Hay varios conceptos que habían estado siempre presentes sobre la familia, linaje, ancestros y que de pronto resurge y vuelven a ser la misma cosa conflictuante y en lugar de convertirse en herramientas para que tú te conozcas mejor y para que entiendas mejor tu historia a través de la historia familiar se vuelve un peso muerto.

En esta entrevista hablamos sobre romantizar las relaciones de familia sobre poner una buena cara, positividad tóxica a una situación dolorosa donde tal vez hayas sido traumatizada y hayas sido violentada por algún miembro de tu familia y qué se hace en esos casos. Hablamos sobre lo que inspiró este podcast que es la “poda” del árbol genealógico, de tres maneras de aproximarte a la historia familiar con objetividad para comprenderla y entender por qué estamos como estamos.

Cuando cortamos la grabación, Mireia me dijo: “¡que hemos abierto muchos melones!”, hablamos un poco de muchas cosas, unas que dan más comezón que otras, pero espero que te sirvan para posicionarte, para armarte de herramientas y para cuestionarte qué tan de acuerdo estás (o no) con las múltiples cosas que se dicen sobre la historia familiar. Aquí tienes la entrevista: